lunes, 4 de abril de 2011

COLEGIO DE BACHILLERES DEL ESTADO DE MORELOS PLANTEL 03 OACALCO

PROFESOR: JOSE RICARDO ABAUNZA ALOA


INTEGRANTES:
 FLORES ARAUJO VALERIA
FLORES GOMEZ REYNA MARISOL
GONZALEZ DE LOS SANTOS SARAI
GUEVARA MORENO DELFINA
ORTIZ ROMERO LUIS ALVERTO
RIOS AVELAR MARGARITA MAGNOLIA

GRUPO:602 V.


ACTIVIDAD: 3

BLOQUE: 2

FECHA: 04/04/11


actividades naturales que emiten gases de efecto invernadero

Las actividades humanas más importantes generan gases de efecto invernadero.
Las emisiones comenzaron a incrementarse de forma espectacular en el decenio de 1800 debido a la Revolución Industrial y a los cambios en la utilización de la tierra.
Muchas de las actividades asociadas con la emisión de gases son ahora esenciales para la economía mundial y forman una parte fundamental de la vida moderna.
El dióxido de carbono resultante de la combustión de combustibles fósiles es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana.
El suministro y utilización de combustibles fósiles contribuye en aproximadamente un 80% a las emisiones producidas por el hombre de dióxido de carbono (CO2)y una significante cantidad de metano (CH4) y óxido nitroso (N2O). También, genera óxidos nitrosos (NOx), hidrocarburos y monóxido de carbono (CO), que aunque no sean gases de invernadero influyen en los ciclos químicos en la atmósfera que crean o destruyen otros gases de efecto invernadero como el ozono troposférico. Mientras tanto, las emisiones de aerosoles de sulfato relacionadas con combustibles enmascaran de forma temporal parte del efecto de calentamiento producido por los gases de invernadero.
La mayoría de las emisiones asociadas con la utilización de energía se producen cuando se queman combustibles fósiles.
El petróleo, el gas natural y el carbón (los cuales emiten la mayor cantidad de carbono por unidad de energía suministrada) proporcionan la mayoría de la energía utilizada para pro- ducir electricidad, hacer funcionar automóviles, calefaccionar hogares, y dar energía a las fabricas. Si la combustión es completa., el único subproducto que contiene carbono sería el dióxido de carbono, pero como la combustión a menudo es incompleta, se generan también monóxido de carbono y otros hidrocarburos. El óxido nitroso y otros ;oxidos de nitrógeno se producen debido a que la combustión de combustibles hace que el nitrógeno que está en el combustible o aire se combine con el oxígeno de la atmósfera. Los óxidos sulfúricos (SOx) se generan cuando el sulfuro (derivado primariamente del carbón y del petróleo pesado de combustible) se combina con el oxígeno; los aerosoles de sulfatos resultantes tienen un efecto refrigerante en la atmósfera.
La extracción, procesamiento, transporte y distribución de los combustibles fósiles también libera gases de efecto invernadero.
Estas emisiones pueden ser deliberadas cuando se quema o libera gas natural de los pozos petroleros, lo que emite dióxido de carbono y metano respectivamente. También se pueden producir debido a accidentes, al mantenimiento deficiente y a pequeñas fugas en las cabezas de pozos, las instalaciones de tuberías y los oleoductos. El metano producido en forma natural en los yacimientos de carbón como burbujas de gas o que está “disuelto” en el mismo carbón, se libera cuando se lo extrae o pulveriza. Los hidrocarburos ingresan en la atmósfera a raíz de los vertimientos producidos por los buques petroleros o debido a pequeñas pérdidas durante la recarga de combustible en los vehículos automotores.
La deforestación es la segunda fuente principal de dióxido de carbono.
Cuando se talan bosques para la agricultura o la urbanización, la mayor parte del carbono presente en los árboles que se queman o descomponen se escapa a la atmósfera. Sin embargo, cuando se plantan nuevos bosques, los árboles en crecimiento absorben el dióxido de carbono y lo retiran de la atmósfera. El gran volumen neto de deforestación más recientes ha tenido lugar principalmente en los trópicos, pero existe una gran incertidumbre científica acerca de las emisiones resultantes de la deforestación y otros cambios en la utilización de la tierras.










La producción de cal (óxido de calcio) para la fabricación de cemento representa una parte importante de las emisiones mundiales de CO2 provenientes de fuentes industriales.
Como el CO2 emitido por los combustibles fósiles, el dióxido de carbono liberado durante la fabricación de cemento se genera en la piedra caliza y por consiguiente es de origen fósil, como sucede principalmente con las conchas marinas y otra biomasa enterradas en los antiguos sedimentos oceánicos.
Los animales domesticados emiten metano. El segundo gas invernadero más importante después del dióxido de carbono es el metano producido por el ganado bovino, vacas lecheras, búfalos, cabras, ovejas, camellos, cerdos y caballos. La mayoría de las emisiones de metano relacionadas con la ganadería se generan por la fermentación intestinal de los alimentos causada por bacterias y otros microbios en los tractos digestivos de los animales; otra de las fuentes resulta de la descomposición del estiércol de los animales.
El cultivo de arroz también produce metano.
El cultivo de arroz en “tierras húmedas” o “arrozales” genera aproximadamente de un quinto a un cuarto por ciento de las emisiones mundiales de metano derivado de la actividad humana. El arroz de tierras húmedas, que representa más del 90% de toda la producción arrocera, se cultiva en campos inundados o regados durante la mayor parte de la temporada de cosecha. Las bacterias y otros microorganismos que se encuentran en el suelo de los arrozales descomponen la materia orgánica y producen metano.
...como así también la eliminación y tratamiento de basura y residuos humanos.
Cuando se entierran desperdicios en basurales, tarde o temprano éstos experimentan una descomposición anaeróbica (sin oxígeno) y emiten metano (y algo de dióxido de carbono). Si el gas no se capta y emplea como combustible, el metano termina escapándose a la atmósfera. Esta fuente de metano es más común cerca de las ciudades donde los residuos provenientes de las casas se transportan a un basural central, que en las zonas rurales, donde los desechos se queman o se dejan para su descomposición al aire libre. También se emite metano cuando se tratan anaeróbicamente los residuos humanos (alcantarillado) como por ejemplo en estanques anaeróbicos o lagunas.
La utilización de fertilizantes incrementa las emisiones de óxido nitroso.
El nitrógeno presente en muchos fertilizantes orgánicos y minerales, además del estiércol, acelera los procesos naturales de nitrificación y desnitrificación producidos por bacterias y otros microbios en el suelo. Dichos procesos convierten una parte del nitrógeno en óxido nitroso. La cantidad de N2O emitida por cada unidad de nitrógeno aplicada en la tierra, depende del tipo y cantidad de fertilizante, las condiciones del suelo y el clima, ecuación compleja que aún no se comprende totalmente.
La industria ha inventado, para usos especializados, varios gases de invernadero potentes de larga duración.
Desarrollados en el decenio de 1920, los clorofluocarbonos (CFC) han sido utilizados como propulsores en aerosoles, la fabricación de espumas plásticas para almohadones y otros productos, en las bobinas de enfriamiento de refrigeradores y aparatos de aire acondicionado, así como en los materiales para la extinción del incendios y como solventes de limpieza. Gracias al Protocolo de Montreal relativo a Sustancias que agotan la capa de ozono, las concentraciones atmosféricas de muchos CFC se están estabilizando, y se prevé que disminuyan en las próximas décadas. Como sustitución de los CFC inocua para el ozono se están empleando otros halocarbonos, principalmente los hidrofluorocarbonos (HFC) y perfluorocarbonos (PFC), que contribuyen al calentamiento global, por lo cual su reducción se ha convertido en objetivo en virtud del Protocolo de Kyoto de 1997. El Protocolo también establece metas en relación con el hexafluoruro de azufre (SF6) usado como aislante de electricidad , conductor de calor, y agente refrigerante; se estima que, molécula por molécula, su potencial de efecto invernadero es 23.900 veces mayor que el del dióxido de carbono.

efecto invernadero, calentamiento global

Efecto invernadero

Se denomina efecto invernadero al fenómeno por el cual determinados gases, que son componentes de la atmósfera planetaria, retienen parte de la energía que el suelo emite por haber sido calentado por la radiación solar. Afecta a todos los cuerpos planetarios dotados de atmósfera. De acuerdo con la mayoría de la comunidad científica, el efecto invernadero se está viendo acentuado en la Tierra por la emisión de ciertos gases, como el dióxido de carbono y el metano, debido a la actividad humana.
Este fenómeno evita que la energía solar recibida constantemente por la Tierra vuelva inmediatamente al espacio, produciendo a escala planetaria un efecto similar al observado en un invernadero.

Efecto Invernadero de varios gases de la atmósfera

Es el proceso por el que ciertos gases de la atmósfera retienen gran parte de la radiación infrarroja emitida por la Tierra y la reemiten de nuevo a la superficie terrestre calentando la misma. Estos gases han estado presentes en la atmósfera en cantidades muy reducidas durante la mayor parte de la historia de la Tierra.
Aunque la atmósfera seca está compuesta prácticamente por nitrógeno (78,1%), oxígeno (20,9%) y argón (0,93%), son gases muy minoritarios en su composición como el dióxido de carbono (0,035%: 350 ppm), el ozono y otros los que desarrollan esta actividad radiativa. Además, la atmósfera contiene vapor de agua (1%: 10.000 ppm) que también es un gas radiativamente activo, siendo con diferencia el gas natural invernadero más importante. El dióxido de carbono ocupa el segundo lugar en importancia
La denominada curva Keeling muestra el continuo crecimiento de CO2 en la atmósfera desde 1958. Recoge las mediciones de Keeling en el observatorio del volcán Mauna Loa. Estas mediciones fueron la primera evidencia significativa del rápido aumento de CO2 en la atmósfera y atrajo la atención mundial sobre el impacto de las emisiones de los gases invernadero.
El efecto invernadero es esencial para la vida del planeta: sin CO2 ni vapor de agua (sin el efecto invernadero) la temperatura media de la Tierra sería unos 33 °C menos, del orden de 18 °C bajo cero, lo que haría inviable la vida.
Actualmente el CO2 presente en la atmósfera está creciendo de modo no natural por las actividades humanas, principalmente por la combustión de carbón, petróleo y gas natural que está liberando el carbono almacenado en estos combustibles fósiles y la deforestación de la selva pluvial que libera el carbono almacenado en los árboles. Por tanto es preciso diferenciar entre el efecto invernadero natural del originado por las actividades de los hombres (o antropogénico).
La población se ha multiplicado y la tecnología ha alcanzado una enorme y sofisticada producción de forma que se está presionando muchas partes del medio ambiente terrestre siendo la Atmósfera la zona más vulnerable de todas por su delgadez. Dado el reducido espesor atmosférico la alteración de algunos componentes moleculares básicos que también se encuentran en pequeña proporción supone un cambio significativo. En concreto, la variación de la concentración de CO2, el más importante de los gases invernadero de la atmósfera. Ya se ha explicado el papel básico que estos gases tienen como reguladores de la temperatura del Planeta.
Los gases invernadero permanecen activos en la atmósfera mucho tiempo, por eso se les denomina de larga permanencia. Eso significa que los gases que se emiten hoy permanecerán durante muchas generaciones produciendo el efecto invernadero. Así del CO2 emitido a la atmósfera: sobre el 50% tardará 30 años en desaparecer, un 30% permanecerá varios siglos y el 20% restante durará varios millares de años.
La concentración de CO2 atmosférico se ha incrementado desde la época preindustrial (año 1.750) desde un valor de 280 ppm a 379 ppm en 2005. Se estima que 2/3 de las emisiones procedían de la quema de combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón) mientras un 1/3 procede del cambio en la utilización del suelo (Incluida la deforestación). Del total emitido solo el 45% permanece en la atmósfera, sobre el 30% es absorbido por los océanos y el restante 25% pasa a la biosfera terrestre. Por tanto no solo la atmósfera está aumentando su concentración de CO2, también está ocurriendo en los océanos y en la biosfera
Los denominados gases de efecto invernadero o gases invernadero, responsables del efecto descrito, son:
  • Vapor de agua (H2O)
  • Dióxido de carbono (CO2 )
  • Metano (CH4)
  • Óxidos de nitrógeno (N2O)
  • Ozono (O3)
  • Clorofluorocarbonos (CFC)
Si bien todos ellos (salvo los CFC) son naturales, en tanto que ya existían en la atmósfera antes de la aparición del hombre, desde la Revolución industrial y debido principalmente al uso intensivo de los combustibles fósiles en las actividades industriales y el transporte, se han producido sensibles incrementos en las cantidades de óxido de nitrógeno y dióxido de carbono emitidas a la atmósfera, con el agravante de que otras actividades humanas, como la deforestación, han limitado la capacidad regenerativa de la atmósfera para eliminar el dióxido de carbono, principal responsable del efecto invernadero.





La capa de Ozono y su deterioro

documental de la capa de ozono

Ozono troposférico

También denominado ozono ambiental. Se trata de un gas incoloro que se crea a través de reacciones fotoquímicas entre óxidos de nitrógeno (NOx) y compuestos orgánicos volátiles (COV) derivados de fuentes como la quema de combustible. Es el compuesto más destacado de los oxidantes fotoquímicos y forma parte del smog.
Puede encontrarse en la zona más baja de la atmósfera, ya que proviene de emisiones naturales de COV, NOx y CO, así como del ozono estratosférico descendente. Esto se convierte en un problema, puesto que el ozono, en concentración suficiente puede provocar daños en la salud humana (a partir de unos 150 microgramos por metro cúbico) o en la vegetación (a partir de unos 30 ppb (partes por billón americano)) y contribuye a generar un calentamiento en la superficie de la tierra. Estas características del ozono han propiciado que dentro de la Unión Europea aparezca una normativa relativa al ozono en el aire ambiente, que establece el nuevo régimen jurídico comunitario sobre el ozono troposférico presente en la baja atmósfera.



Su formación empieza a partir de la emisión del dióxido de nitrógeno (NO2) e hidrocarburos (compuestos que reaccionan en la presencia de calor y luz solar para producir ozono).
El mecanismo mediante el cual se genera el ozono en la troposfera es completamente distinto, ya que a esta altura no llegan las radiaciones ultravioletas. El ozono en este caso, se forma a partir de ciertos precursores (NOx - óxidos de nitrógeno; y VOCs - compuestos orgánicos volátiles, como el formaldehído), contaminantes provenientes de la actividad humana. Estos contaminantes se disocian formando radicales con radiación menos energética, y dichos radicales pueden formar ozono con el oxígeno molecular.
El conjunto del ozono, NOx y VOCs forma una neblina visible en zonas muy contaminadas denominada smog fotoquímicoo smog de invierno